10.04.2019

Llega un punto, cada cierto tiempo, puede ocurrir: una vez al día, cada semana, una vez al mes, una vez en 5 años o una vez en la vida, pero llega un punto en donde todo parece no tener sentido. A mi, por ejemplo me atacó un fenómeno o bueno así le llamo, el cual me bloqueo la mente y no me permitió escribir durante aproximadamente un ańo, al principio pensaba que era cuestión de unos días, pero pasaron las semanas y los meses sin estar inspirada, hasta hoy que decidí sentarme a escribir, algo en mi lo pidió. Pero no escribo para hablar de mi, lo hago para dar luz a quien necesite, en el pasado me hubiera puesto a escribir cosas románticas, que dejaban a los enamorados más enamorados y a los despechados con el corazón un poco más roto, pero en este preciso momento quiero que quien me lea se sienta como quiera sentirse, porque tenemos todo el derecho de querer amar mas fuerte, recordar con el corazón, gritar con todas nuestras fuerzas, reír a gritos o llorar en silencio.

Es verdad, como decía al principio puede ser que en este momento no le encontremos sentido a muchas cosas, pero así como muchos no le encontramos sentido a un sin fin de cosas, puede que muchos otros creamos tener todo solucionado y le encontramos sentido a casi todo lo que ocurre, y esta bien.

Es cierto necesitamos de vez en cuando que nos abracen tan fuerte que nuestro corazón quede completo de nuevo,

se vale sentarse a tomar un cafe sin compañía y disfrutarlo, sin pensar en nadie ni en nada,

se vale querer estar rodeado de gente cantando, bailando y riendo,

se vale amar a quien queramos con todas las fuerzas, sin dudarlo,

se vale preferir estar por la vida solos, sin dejar que nadie te diga que el tren te va a dejar porque tienes 25 años y según los demás no sea lo que quieres;

se vale extrañar a alguien que ya no está con nosotros en la tierra, o que por elección personal decidió marcharse,

se vale reír por todo,

se vale llorar por nada,

se vale no estar bien siempre;

se vale que todo te resbale.

Lo que no se vale es que dejes que los demás te digan que lo que te hace feliz para ellos no esta bien,

tampoco se vale que te digan que estas mal, cuando en realidad solo tu sabes lo que tienes por dentro.

Tienes todo el derecho de querer ser feliz o de querer estar triste un ratito, pero no dejes que lo malo que ocurre

te marque de forma trágica por siempre, aprende, vuela, ve a lugares que te hagan olvidar por un ratito,

tal vez olvidar por completo será imposible, pero deja que tu corazón sane de la manera que a el le parezca correcta.